En todas las entrevistas de trabajo, los responsables de selección suelen incorporar al proceso de selección preguntas que pretenden ir un poco más allá. Son las llamadas “preguntas trampa”, destinadas a saber un poco más de los empleados y descubrir otros aspectos del candidato que no se reflejan en el currículum.

Hoy en Axpe Consulting os queremos acercar algunas  de estas preguntas trampa que  destaca el portal de búsqueda de empleo Infojobs.

1.- ¿Cómo te defines?

Es la más clásica y previsible, empezar por un “no sé…” es un gran error. Hay quien recomienda que lo mejor es preparar una lista de 3 a 5 adjetivos que definan tu forma de trabajar, de relacionarte con tus compañeros y sobre tu propio carácter.

La autopercepción del propio candidato ayuda a detectar al empleador posibles problemas de personalidad. El autoconocimiento indica que al menos has dedicado un tiempo a reflexionar sobre ti mismo, lo cual refleja madurez. Un análisis DAFO te puede ayudar, es decir, destacar tus Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades.

2.- ¿Por qué quieres cambiar de empresa?

En el caso de que el candidato esté trabajando, se le preguntará el motivo por el que se plantea un cambio. La motivación por el puesto al que accede es el objetivo final de esta pregunta. Ser honesto es muy importante, no sólo pensando en la parte del entrevistador, sino también en el candidato.

Si el cambio viene producido por cuestiones ajenas al candidato, como el término del contrato, es necesario recalcar algún interés personal y de promoción hacia la empresa a la que postulas.

3.-  ¿Por qué dejaste la empresa anterior?

Esta pregunta esconde una segunda intención, no sólo descubrir si se debe a un acto de voluntad propia o un despido, sino también la percepción que tiene el empleado de su antigua empresa. Los contactos dentro del mundo empresarial funcionan bastante bien, y siempre pueden pedir referencias a tus antiguos empleadores.

De nuevo, recurrir a la honestidad y no caer en el error de criticar a la empresa, a tu jefe o a tus antiguos compañeros, ya que esto te descartaría directamente de la oferta, aunque sea para un puesto en la competencia. Los entrevistadores podrían deducir que ese comportamiento podría darse en un futuro con la nueva empresa, por lo que no les gustará oír ese tipo de comentarios.

4.- ¿Cómo era la relación con tu antiguo jefe?

Hay entrevistadores que te descartan directamente por malos comentarios sobre tu jefe. Para preguntas como, ¿qué era lo que menos te gustaba de tu jefe? hay que tener cuidado, aunque los motivos sean suficientes, se puede deducir que eres una persona conflictiva. Es mejor no entrar en valoraciones de ningún tipo.

5.- ¿Cuáles son tus hobbies?  

Las aficiones buscan obtener más información de la personalidad del entrevistado, si prefiere deportes de equipo, labores solidarias, creativas, manuales, competitivas…  Si dices que te gusta leer, prepara una lista de libros, si te gusta el cine, procura aprenderte el argumento de una película que esté en cartelera o lo haya estado hasta hace poco. Tampoco nos inventemos aficiones, por ejemplo, decir que jugamos al golf cuando no lo hemos practicado nunca.

Aunque en casi todas las preguntas el candidato debe mostrar un punto de picardía, siempre ha de tener presente en todo momento sus preferencias, su situación, lo que quiere conseguir y lo que espera de la empresa. Ser honestos es la clave para todo, ya que no se trata de conseguir un puesto de trabajo a costa de todo, sino de encontrarse a gusto y encajar en la empresa para la que postulas.

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